Fundación Adecco lanza este mes la campaña #PonleFinAlParo para acompañar a aquellas personas en desempleo de larga duración en su camino hacia la búsqueda de un puesto de trabajo
El currículum, o por su abreviatura CV, es un documento que resume nuestra identidad personal y, sobre todo, profesional. Es la primera imagen que mostramos de nosotros para cualquier oferta de trabajo; el espacio para poner en valor cualidades, actitudes, competencias, habilidades profesionales, conocimientos, experiencias y valores.
Para ello, tener un currículum de base que poder personalizar para cada oferta de empleo solicitada es el primer paso hacia el éxito de la búsqueda. Recuerda, un solo CV no vale para presentar tu candidatura a ofertas de empleo distintas. Es recomendable ajustarlo a cada sector e, incluso, a cada perfil demandado. Además, en función del momento profesional en el que nos encontremos, podremos optar por un hacer un currículum cronológico (recomendado para personas con mucha y variada experiencia, que tengan que detallarla año a año) o por el funcional.
¿Qué es y por qué crear un currículum funcional?
Este tipo de currículum es el idóneo si tienes poca o nula experiencia laboral, ya que este modelo es el que destaca funciones y actividades que podrías realizar de acuerdo a tu preparación, aptitudes y actitudes por encima de una dilatada experiencia o de un extenso historial académico. Haz mucho hincapié en todas las fortalezas que detectes en tu personalidad para dar cuenta de tu capacitación. No importa que este apartado sea el que ocupe la mayor parte del currículo.
También es el modelo más recomendable si has tenido alguna etapa prolongada en el paro, ya que no aporta tantos detalles temporales como el cronológico.
¿Cómo hacer un CV funcional?
Para comenzar a crear tu currículum funcional debes clasificar el contenido que incluirás en categorías. Por ejemplo, primero información personal, luego una descripción de ti, enumerar tus habilidades y aptitudes y, finalmente, tu formación y experiencia, si procede.
Enumera tu información personal
En este apartado debes indicar tus datos, como teléfono de contacto, email, ciudad o provincia de residencia e idealmente un enlace a tu perfil de Linkedin.
Comienza con una descripción personal
Aquí puedes incluir tu perfil profesional, principalmente cuáles son tus objetivos y expectativas.
Describe brevemente tus aptitudes
En ese punto tienes que incluir todas las habilidades que pueden ser valoradas a nivel profesional, como el trabajo en equipo, buen manejo de relaciones, organización, etc.
Añade tus datos académicos más recientes y relevantes
Como en cualquier CV, debes incluir tus últimas formaciones.
Describe tu experiencia profesional
Incluye tu experiencia profesional, principalmente la que pueda ser relevante para el puesto. No olvides incluir el periodo en que estuviste en cada empresa y qué funciones realizabas.
Un último consejo y un ejemplo para tu currículum funcional
Pon atención en la redacción, sin cometer faltas de ortografía (repásalo con el corrector) y utiliza frases cortas que se entiendan bien. Ten en cuenta que a un mismo proceso de selección pueden presentarse muchos candidatos, ¡pónselo fácil al departamento de selección! Aunque dediques un párrafo a mostrar tus fortalezas y expectativas, no está de más que resumas esas ideas en una primera descripción a modo resumen.
Descarga la plantilla para crear tu propio CV funcional pinchando aquí.
