Deseo para 2016: que los mayores de 45 años accedan al empleo en igualdad de condiciones y con garantías - Diversidad e inclusión
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Deseo para 2016: que los mayores de 45 años accedan al empleo en igualdad de condiciones y con garantías

Deseo para 2016: que los mayores de 45 años accedan al empleo en igualdad de condiciones y con garantías

Los senior, motor de futuro

En estas fechas, es frecuente que planteemos deseos de cara al año venidero. En la Fundación Adecco ya hemos formulado los nuestros y, hoy, me gustaría detenerme en uno de ellos: que los mayores de 45 años accedan al empleo en igualdad de condiciones y con garantías. En primer lugar, por una cuestión de justicia social: y, en segundo, porque nuestra economía necesita nutrirse del talento senior: en una sociedad cada vez más envejecida y en la que las nuevas cohortes se verán con el agua al cuello para soportar la carga fiscal, discriminar a un mayor de 45 años es un completo contrasentido.

Y es que, aunque parezca evidente, merece la pena recalcar que la situación ha dado un giro de 360 grados con respecto al año 1919, cuando se establecía por primera vez en España un sistema público de pensiones. Por aquel entonces, la edad de jubilación se fijó en 65 años y la esperanza de vida al nacer apenas superaba los 40 años. Casi un siglo después, la expectativa de vida se ha duplicado, lo que ha exigido aumentar progresivamente la jubilación, hasta los 67 años. En la actualidad, una persona de poco más de 40 años ya no es abuelo, sino padre –aunque esta faceta ya no es imperativa, sino opcional-, y además a su vez sigue siendo hijo, constituyendo un eslabón intermedio imprescindible para la sostenibilidad de nuestro sistema.

Sin embargo, nuestra sociedad se empeña, aún, en conservar algunos “tics” herederos de aquella primera mitad del siglo XX, casi decimonónica. Pues seguimos asistiendo a situaciones de discriminación laboral cuando se superan los 45 años, a pesar de que son profesionales en el ecuador de su vida profesional. Si bien en el último año hemos observado un cambio de tendencia, al haber ocupado los mayores de 45 años la mayor parte del empleo generado, cabe preguntarse si este viraje obedece a un verdadero cambio de mentalidad o más a una cuestión estadística- los mayores de 45 años constituyen el porcentaje más representativo de parados- o incluso económica –actualmente las empresas pueden permitirse contratar a estos profesionales por salarios más económicos-.

Este es, precisamente, el gran reto: que desde las empresas tomemos verdadera conciencia de lo imprescindible de contratar profesionales senior. Para empezar, y reiterando lo dicho en el primer párrafo, porque su participación en el mercado resulta clave para garantizar la sostenibilidad del sistema público de pensiones: recordemos que la relación cotizante- pensionista es de 2,4 y, si sigue cayendo, las arcas del Estado no podrán hacerse cargo de la creciente masa de jubilados. Y en segundo lugar, por los valores intrínsecos que albergan: madurez, experiencia, control emocional, templanza y otros muchos. En muchos casos, se sigue dando por hecho que el mayor de 45 años es un profesional obsoleto, sin darle la oportunidad de demostrar su valía, lo que constituye una notable pérdida de talento y competitividad para nuestra economía.

Paralelamente, las empresas deberemos acometer medidas para adaptarnos a  la  fuerza laboral emergente: promoción de la salud, formación continua (clave para facilitar la reinserción laboral en el caso de los desempleados), reemplazo de tareas físicas por cognitivas, etc.  Debemos poner la vista en el futuro, siendo conscientes de que los mayores de 45 años que hoy se enfrentan a discriminación, serán los que garanticen la continuidad de nuestro sistema mañana.

Sólo con determinación, trabajando por el cambio de mentalidad y con el compromiso de todas las empresas, se hará realidad lo que hoy aún concebimos como un deseo.

*Francisco Mesonero es director general de la Fundación Adecco, entidad experta en programas de empleo para mayores de 45 años, que el pasado año generó 1.604 empleos para personas de esta edad.

 

 

 

Irene Gil
irenegilromero@gmail.com

Periodista. Más de una década profundizando en la situación social y laboral de las personas en riesgo de exclusión.

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