Nacho Guerreros: «el Respeto y la Empatía deberían ser asignaturas obligatorias en los colegios»

-

Nacho Guerreros (La Rioja, 1970) está de moda. Además de dar vida al entrañable «Coque» en  La que se avecina, este mes de febrero ha estrenado, en el Teatro Español de Madrid, la obra «Juguetes Rotos»,  un espectáculo que invita al autodescubrimiento y a reflexionar sobre las convenciones socialmente impuestas. Algo más desconocida es su faceta social: en su juventud, trabajó con personas con discapacidad. Además, el año pasado publicó  Yo también sufrí bullying, colocando esta lacra en el centro del debate social. Desde la Fundación Adecco, hemos tenido el placer de charlar con él.

P. ¿Quién es Nacho Guerreros? ¿Cómo te defines en 2 palabras?

R. Soy un «obrero terco». Trabajo sin descanso hasta conseguir lo que busco. Es lo que tiene esta profesión: no te puedes rendir, siempre estás como empezando de nuevo y hay que asimilarlo.

P. ¿De dónde viene tu vena artística?

R. Lo mío es completamente vocacional: desde que tengo uso de razón quiero dedicarme al espectáculo, nunca se me ha ocurrido mejor forma de enfocar mi vida. Es verdad que he desempeñado otros trabajos, pero lo que me gusta de verdad es esto: la televisión, el teatro y el cine cuando venga, que ya llegará…

P. Precisamente, uno de tus primeros trabajos fue con personas con discapacidad, ¿qué aprendiste de la experiencia?

R. Yo creo que les ayudaba a «vivir»: trabajé con personas que no tenían posibilidad ni de lavarse los dientes. Aprendí a valorar mucho la vida, lo que tenía y tengo: 2 piernas, 2 manos y una cabeza todavía en su sitio. A veces nos quejamos de vicio y no reparamos en las pequeñas cosas: algo tan simple como coger un vaso de agua y llevárnoslo a la boca es imposible para muchas personas. Aprendí que yo tengo la suerte de poder hacerlo y, a partir de ahí, todo me parece bien.

P. Tu personaje en La que se avecina es conocido y querido por todos. ¿Qué hay de Nacho Guerreros en Coque?

Yo creo que no me parezco en nada, sólo en el físico y en el pelo (que  es mío, aunque hay gente que me lo pregunta). Precisamente es lo que me gusta, interpretar a personajes que están totalmente alejados de mí, es mucho más divertido. Aunque reconozco que a veces sí me gustaría tener algo de la ingenuidad e Coque…

FOTO: Marcos Pergón

P. Siendo tan opuesto al personaje, ¿dónde buscas la inspiración para interpretarlo?

R. Realmente no me supone ninguna dificultad : cuando me pongo la americana y me maquillan,  me convierto automáticamente en Coque. Es lo que tiene trabajar en series de largo recorrido, que haces tuyo el personaje sin que sea un reto meterte en su piel.

P. La suerte sonrió a tu familia hace unos años, con el Premio de la Lotería de Navidad ¿cómo te cambió la vida?

R. Me acuerdo perfectamente de la fecha:  el 14 de abril de 2005. Gracias a este premio, compré los derechos de autor de una función de teatro, con  el préstamo que pedí a mis padres. Y pudimos hacer realidad esa función, que resultó ser  un éxito. Fue una apuesta arriesgada, porque yo no sabía cómo iba a funcionar.  Supuso un paso de gigante, pues a partir de ese momento mi vida profesional se encauzó.

P. Hablando metafóricamente, ¿qué es para ti que te toque la lotería en la vida?

R. A mí la lotería me vino con La que se avecina.  No se me ocurre mayor suerte que formar parte de ese equipo y haber vivido el éxito que ha tenido.

P. A los 13 años sufriste acoso escolar. Ahora como adulto y autor del libro “Yo también sufrí bullying” ¿a dónde crees que deberían enfocarse las medidas para acabar con esta lacra?

R. Las medidas tienen que orientarse a la prevención e instalarse en los colegios desde que los niños son pequeños. Hay que educar desde edades tempranas: el RESPETO y la EMPATÍA deberían ser  asignaturas obligatorias en los colegios.  Ahora bien, esto  no sirve de nada si luego el niño llega a casa y no se le refuerza en estos valores. Ese es el verdadero problema: la educación familiar no está basada en el respeto y la empatía. El otro día leía una noticia de un señor que había pegado al profesor de su hijo delante del pequeño. Desacreditamos delante de nuestros hijos y eso es inadmisible: si tú no educas en casa, desde la base, tu hijo no se educará  en el colegio.

P. Por último, y a nivel artístico, ¿qué proyectos tienes?

R. Estoy en el Teatro Español, en la Plaza de Santa Ana de Madrid, con la función, “Juguetes Rotos”, del 1 de febrero al 4 de marzo, de martes a domingo. Está yendo fenomenal de críticas y de público y  estoy encantadísimo. Y también sigo con el rodaje de La que se avecina.

Cartel Juguetes Rotos
Cartel Juguetes Rotos

 

Irene Gil
Periodista. Más de 10 años dedicada a la Comunicación corporativa, profundizando en la situación social y laboral de las personas que lo tienen más difícil.

Compartir

Últimos posts