Las empresas se encuentran preparando sus informes de Responsabilidad Empresarial además de verificar su cuenta de ingresos y resultados, para un año que aún sigue convulsionado por la crisis económica local e internacional.
Sin embargo, el parámetro de los informes de RSE también ha ido cambiando y las exigencias por los mismos se hacen más presentes en una sociedad que exige transparencia. Hay corrientes y plataformas de reporting que ya exigen la presentación del informe integrado, informe económico y social en uno sólo; como hay aquellos que solicitan una mayor verificación en los avances de la contribución social de las empresas.
Parte de la responsabilidad de los especialistas en RSE, será la de dar a conocer a sus superiores la prioridad de información que debe ser puesta en manos de la sociedad y sus grupos de interés.
No cabe duda de que la empresa no va a autodestruir su imagen con información que le perjudique, pero si debe tener en cuenta cómo comunica los avances logrados, así como las dificultades de los propósitos “responsables” que haya puesto en marcha.
Recientemente ha crecido el debate por la transparencia y fiabilidad de los informes de RSE, donde todo lo que se traslada es positivo aunque la empresa cuente, por ejemplo, con un proceso de restructuración interno, incumplimiento de normativas medioambientales, o la ausencia de cumplimiento de la LISMI (ley de integración de la discapacidad).
Con este fin el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea, siguen avanzando en las exigencias a las grandes empresas cotizadas, lo que se irá permeando a través de nuevas regulaciones al resto de las empresas.
Informar de forma concisa sobre los inconvenientes para llevar a cabo el 100% de un objetivo en RSE, denota transparencia y reconocimiento de los propios riesgos y resultados alcanzados. La reputación empresarial pasa por evidenciar sus fortalezas y fuerza competitiva, pero también debe ser una rendición de cuentas sobre el esfuerzo “voluntariado” al que muchas empresas dicen haberse sumado para construir un mundo mucho mejor.