Qué no hacer en una entrevista de trabajo

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Cuatro cosas que nunca debes hacer en una entrevista laboral

Estás buscando trabajo y de repente ves una oferta en la que encajas a la perfección, te inscribes y te llaman porque quieren verte en una entrevista. Cuando la haces, sales contento y satisfecho, piensas que ha transcurrido muy bien y que el trabajo es tuyo, pero pasan los días y no recibes respuesta. ¿Qué ha podido pasar? En este post repasamos algunos de los fallos más comunes en un proceso de selección, aquellas cosas que nunca deberías hacer en una entrevista para optar a un puesto de trabajo.

No mostrar interés

Ante cualquier proceso de selección no solo es importante mostrar interés por el puesto en sí, también por la empresa. Es fundamental que te informes antes de acudir a la entrevista sobre los objetivos inmediatos de la compañía, su historia y evolución, su misión, visión y valores, etc. De esta manera, el seleccionador sabrá que te has preparado la entrevista y que estás al tanto de lo que implica optar a ese determinado puesto. Además, si es la primera vez que vas a trabajar en un sector concreto, también es recomendable que te informes sobre su funcionamiento y sobre la competencia más directa de la empresa en la que aspiras a entrar.

No decir la verdad

Mentir en un currículum o en una entrevista solo conduce a un callejón sin salida. Nunca intentes inflar tu experiencia o tu formación porque, tarde o temprano, se darán cuenta de que no estás cualificado para el puesto. Es preferible decir la verdad: por ejemplo, si solicitan experiencia en determinadas tareas y no cuentas con ella, siempre puedes argumentar que estarías encantado de afrontar nuevos retos o que otras responsabilidades anteriores te han preparado para ello.

Hablar mal de la anterior empresa y de tus excompañeros de trabajo

Haber vivido una experiencia laboral complicada no justifica criticar a tu anterior empresa, ni a un antiguo jefe. Esas malas valoraciones se pueden volver en tu contra: ¿te imaginas que el entrevistador, al ser del mismo sector, tenga relación con tu anterior empresa? Tus malas palabras también podrían hacer pensar a tus nuevos empleadores que serías capaz de repetir esas mismas críticas ‒pero esta vez hacia ellos‒ en el futuro. Es recomendable que destaques los aspectos y enseñanzas positivos.

Llegar tarde a la entrevista

Quizá te parezca demasiado obvio, pero la puntualidad es primordial. Llegar tarde a una entrevista demuestra falta de interés, de motivación… Siempre es mejor que te planifiques con antelación. Si llegas con algo de tiempo, espera a la hora indicada para acceder al lugar de la entrevista.

Si logras no caer en estos cuatro errores, estarás más cerca de ese puesto de trabajo soñado. Y no lo olvides, una actitud positiva y proactiva siempre contará como un punto a favor. 

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