Los conceptos de incapacidad laboral y discapacidad suelen confundirse o interpretarse como sinónimos de una misma situación, sin embargo, se trata de conceptos administrativos que en ningún caso pueden interpretarse como iguales.
Las diferencias entre incapacidad laboral y discapacidad van desde el punto de vista legislativo hasta el social. Aquí te explicamos a qué se refiere cada concepto y cuáles son sus diferencias.
Qué es una incapacidad laboral
La incapacidad es la situación en la que una persona trabajadora ya no puede desempeñar un determinado trabajo o ningún trabajo. Es decir, que está relacionada con la capacidad de cumplir con una actividad laboral.
Estos casos son reconocidos por el Instituto Nacional de la Seguridad Social, que identifica cuatro tipos de incapacidad.
Incapacidad temporal
Cuando la persona trabajadora está imposibilitada temporalmente para trabajar y requiere asistencia sanitaria.
Para tener derecho a la incapacidad temporal, la persona tiene que haber cotizado un mínimo de 180 días dentro de los últimos cinco años, sin embargo, cuando la incapacidad temporal es derivada de un accidente o enfermedad profesional no se exige este requerimiento
Ejemplo de incapacidad temporal
Una persona que ha tenido que someterse a una operación estará temporalmente imposibilitada para trabajar, pero al recuperarse vuelve a estar activa laboralmente.
Incapacidad permanente parcial
Se trata de aquellos casos en que las secuelas de una enfermedad o accidente provocan una disminución en el rendimiento laboral, pero que no inhabilita totalmente para llevar a cabo aquellas labores.
Ejemplo de incapacidad permanente parcial
Una persona que trabaja de administrativa es operada del túnel carpiano y queda con ciertas complicaciones permanentes, esta persona podría seguir en su puesto de trabajo pero con algunas necesidades específicas, como un ratón adaptado.
Incapacidad permanente total
Este tipo de incapacidad se le reconoce a la persona trabajadora que no puede realizar todas las funciones de su profesión habitual, pero que sí se puede dedicar a otra profesión.
Ejemplo de incapacidad permanente total
Una persona que trabaja en un almacén tiene un accidente laboral que le genera imposibilidad de coger peso. Esta persona no podría seguir trabajando en el almacén, pero sí en otro trabajo que no implique ese tipo de esfuerzos.
Incapacidad permanente absoluta
La incapacidad laboral permanente absoluta es aquella que impide que la persona pueda desempeñar ninguna profesión u oficio.
Qué es el certificado de discapacidad
Por su parte, el certificado de discapacidad es el documento que reconoce la calificación del grado de discapacidad y es emitido por los centros de valoración y orientación de cada Comunidad Autónoma o el IMSERSO en el caso de Ceuta y Melilla.
Otras diferencias entre incapacidad laboral y discapacidad
Otra diferencia que se puede identificar entre incapacidad laboral y discapacidad es que una incapacidad generalmente conlleva el cobro de una prestación económica, en lo laboral, mientras que la discapacidad no está necesariamente relacionada a este tipo de cobros.
Además, como se explica anteriormente, la incapacidad se mide en grados; temporal, permanente parcial, permanente total o permanente absoluta y la discapacidad se valora en porcentaje, siendo el 33% el mínimo para obtener el certificado que la acredita legalmente.
Pese a las claras diferencias conceptuales, actualmente las personas que tienen una incapacidad permanente total están consideradas -a efectos laborales- como una persona con discapacidad a partir del 33%.
