Medidas de seguridad en el trabajo
La seguridad en el trabajo se refiere a las prácticas que previenen accidentes y enfermedades relacionadas con el empleo. Es fundamental para proteger la salud y el bienestar de las personas trabajadoras y, de este modo, garantizar que el entorno laboral sea seguro. Es una responsablidad que recae principalmente en las empresas o personas empleadoras, pero también es importante que la plantilla conozca estas medidas. Puede resultar fundamental en el caso, por ejemplo, de empleados con algún tipo de discapacidad.
Estas medidas variarán en función del tipo de empresa y de la labor que en ella se desempeñe. Las consideraciones a tener en cuenta no serán las mismas en una oficina en la que se desarrolla un trabajo sedentario que las de una fábrica donde se manipulan máquinas y materiales pesados.
Entender y ejercer estos derechos y obligaciones no solo te protege como trabajador, sino que también contribuye a crear un ambiente laboral seguro y saludable, por eso es importante que las conozcas.
¿Cómo mejorar la seguridad en el trabajo?
Autoevaluación
Las empresas deben realizar autoevaluaciones periódicas para identificar posibles riesgos en el lugar de trabajo. Esto permite tomar medidas preventivas antes de que ocurran accidentes o de que la salud mental de un trabajador corra peligro.
Como persona trabajadora puedes colaborar con la empresa en las evaluaciones de riesgos, proporcionando información y siguiendo las indicaciones para mejorar la seguridad día a día.
Plan de seguridad
Un plan de seguridad debe incluir protocolos claros para situaciones de emergencia, procedimientos de evacuación y, si es el caso, el uso correcto de equipos de protección personal. Las empresas deben elaborar este documento para identificar y gestionar los riesgos laborales que puedan afectar a sus equipos. Este plan es obligatorio y debe cumplir con la normativa establecida por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
Como trabajador de una empresa tienes derecho a consultar dicho plan de seguridad. De hecho, las empresas están obligadas a poner a disposición de sus empleados toda la información relacionada con la seguridad y salud en el trabajo. Puedes solicitarlo al departamento de Recursos Humanos o Seguridad para que te hagan llegar una copia o te indiquen dónde puedes consultarlo (intranet, tablón de anuncios, manual del empleado, etc.).
Formación para empleados
Como apuntábamos al principio, la responsabilidad en el ámbito de la seguridad no recae solo en la empresa, también en sus empleados. Es esencial que todo el equipo reciba una capacitación adecuada sobre las normas de seguridad y cómo prevenir accidentes. La educación continua y las actualizaciones pueden mantener a todos informados y preparados.
Registro de accidentes
Llevar un registro detallado de los accidentes (y cuasi accidentes, es decir, inicidentes que no han provocado lesiones ni daños materiales pero que podrían haberlo hecho) ayuda a identificar patrones y áreas que requieren mejoras. Esto facilita la implementación de medidas adecuadas. De nuevo, esto recae en la empresa, pero como empleado puedes colaborar en la evaluación de riesgos. ¿Cómo? Proporcionando información y siguiendo las indicaciones para mejorar la seguridad en el lugar de trabajo.
Como persona trabajadora puedes informar a tu superior o persona responsable de cualquier situación que consideres peligrosa o que pueda suponer un riesgo para tu salud o la de tus compañeros. Debes sentir la libertad de poder reportar cualquier incidente, riesgo o preocupación de seguridad sin temor a represalias. Esto fomenta una cultura de seguridad abierta y transparente.
Cumplir con la normativa
Acatar la normativa de seguridad laboral no solo es una obligación legal, sino también una práctica que garantiza un entorno seguro. No olvides estar al día sobre las regulaciones y adaptar las prácticas laborales. Del mismo modo, si consideras que una tarea representa un riesgo para su salud o seguridad, puedes negarte a realizarla hasta que se implementen las medidas de seguridad necesarias.
Recomendaciones de seguridad en el trabajo para personas con discapacidad
Si tienes discapacidad y acabas de incorporarte a una empresa, no dudes en comunicar de manera clara y proactiva las necesidades de adaptaciones o apoyos que necesitas para desempeñar tu trabajo con seguridad.
Además, es muy útil que los propios profesionales con discapacidad sean los que participen en las evaluaciones de riesgos, colaborando en la identificación de los mismos para ajustar los protocolos de seguridad.
Para que estos protocolos sean exitosos, las personas con discapacidad han de formarse adecuadamente, asegurándose de comprender los procedimientos de seguridad (como planes de evacuación y uso de equipos de protección personal). En este sentido, es importante identificar puntos clave, localizando rutas de emergencia, extintores, alarmas y otros recursos de seguridad adaptados.
Las empresas tienen la responsabilidad de proporcionar un marco idóneo. Adaptar el entorno laboral para que sea accesible y seguro para personas con discapacidad es parte fundamental de cualquier plan de seguridad. Para lograrlo algunas claves son eliminar barreras físicas mediante medidas de accesibilidad (rampas, puertas automáticas, baños accesibles y estaciones de trabajo ajustables), adaptar equipos (personalizarlos según las necesidades de cada empleado: teclados ergonómicos, sillas con soporte lumbar, pantallas de computadora ajustables…) o desarrollar protocolos de emergencia (planes de evacuación que consideren la movilidad reducida y la comunicación clara de los procedimientos a seguir en caso de emergencia).Sin olvidar aquellos recursos adicionales y de apoyo, como asistentes personales o tecnología de asistencia, que puede ayudar a los empleados con discapacidad a desempeñar sus funciones de manera efectiva y segura.
Del mismo modo, capacitar a todos los empleados sobre la inclusión y la accesibilidad es importante para crear un ambiente de trabajo inclusivo, promoviendo la sensibilización acerca de las necesidades y derechos de las personas con discapacidad fomenta el respeto y la cooperación entre compañeros de trabajo.
La importancia de la salud mental
Por último, hay que tener en cuenta que las medidas de seguridad también hacen referencia a la salud mental de los trabajadores. Para ello, hay que identificar los riesgos psicosociales, promocionar un entorno sano y positivo, capacitar en la gestión del estrés, garantizar el acceso a servicios de apoyo o promocionar la flexibilidad cuando sea necesario. Por ejemplo, algunas personas con discapacidad por diagnóstico de salud mental requieren horarios con mayores descansos o son más productivos trabajando desde casa. Tener en cuenta sus necesidades también contribuye a espacios de trabajo amables y con la seguridad necesaria para que desarrollen su talento.