En las estrategias de Diversidad, Equidad, Inclusión y Pertenencia (DEIB) cada vez más se está hablando del Inclusiveness, pero ¿qué es el «inclusiveness»? Realizando una traducción literal, podríamos decir que es la propiedad que convierte a un proceso, una instalación, una persona o una empresa en inclusiva. Sin embargo, profundicemos un poco más en estos conceptos.
En post anteriores hablamos del «Inclusion Journey» como un conjunto de acciones y adaptaciones que hay que implementar a lo largo del employee journey para asegurar que alcanzamos los objetivos de inclusión de la empresa.
En este sentido, se está avanzando cada día más en el desarrollo de culturas empresariales inclusivas, es decir, abiertas a la diversidad y en las que se valora la diferencia para fortalecer la innovación y competitividad y, al mismo tiempo, en la defensa de los derechos humanos y la igualdad de oportunidades para todas las personas.
Podríamos decir que esta es la base del inclusiveness. Crear ecosistemas empresariales y laborales que favorezcan el acceso, la participación, la integración e inclusión en igualdad de condiciones.
Definición de inclusiveness o habilidad de incluir
No es una idea, una filosofía o una campaña de marketing. Es una experiencia individual que conduce al desarrollo de la habilidad de incluir. Mediante esta habilidad se desarrolla el deseo, la percepción y la capacidad de buscar la inclusión a la hora de tomar decisiones, hacer negocios, pensar y actuar. De esta manera, todas las personas que forman parte de una compañía empezarán a generar hábitos inclusivos, alejándose del efecto inconsciente de discriminar y excluir.
El resultado del inclusiveness es la inclusión. Podríamos decir que es la cualidad que define a una persona, empresa, organización o incluso instalación o recurso material que contribuye activamente con la inclusión. De esta manera, aquellas empresas que desarrollan esta habilidad en sus managers y en sus equipos mediante formación y sensibilización se podría decir que son empresas inclusivas.
¿Cómo cambiar hacia modelos inclusivos?
Como decíamos podemos hacer que un proceso, una persona, un diseño, un proyecto o una empresa, sean inclusivos, pero ¿qué debemos tener en cuenta si queremos generar cambios inclusivos?
Mirada inclusiva
Lo primero que llevar a cabo es un cambio de mirada en las tomas de decisiones. ¿cómo es la mirada inclusiva?
- La mirada inclusiva es amplia y abierta a la diversidad. Importante tener en cuenta las 4 dimensiones de la diversidad a la hora de tomar cualquier decisión que implique o impacte sobre personas.
- A la vez, es una mirada que pone el foco en cada persona. Evita o reduce las generalizaciones para tomar decisiones
- Reconoce la existencia de situaciones injustas y de desigualdad.
- Es una mirada consciente, que trata de enfrentarse a sus propios prejuicios.
- Una mirada que observa con detalle. No mira para señalar la diferencia.
- Es una mirada que acompaña.
- Sensible, que se emociona.
- No clasifica a las personas entre «normales» y «no normales».
- Es una mirada que no etiqueta.
- Que sabe ver lo mejor de cada persona.
Escucha igual
Escucha a las mujeres de la misma manera que a los hombres y a las personas con discapacidad, migrantes, LGTBI+ o a minorías, de la misma forma que al grupo normotípico o dominante. Haz que su opinión sea escuchada, sea relevante e importante.
Visibiliza la diversidad
Ilustra tus textos, campañas, discursos, diseños o videos con modelos y ejemplos que representen la diversidad. Cambia el punto de vista para recoger nuevas voces y para innovar presentando ”Role Models diversos”.
Empatía y sensibilidad
Ponte en el lugar de las personas con las que te comunicas para las que diseñas un proceso o un producto o servicio, una tecnología, un proyecto o una instalación, entre otros, y adáptate a sus necesidades, incorporando criterios que favorezcan la participación de todas las personas.
Apoya activamente la inclusión
Haz que cualquier cambio transmita el apoyo activo a la inclusión. No contribuyas a reforzar imágenes o visiones estereotipadas en todo aquello que hagas. Apoyemos la inclusión de todas las personas.
Enfréntate a los sesgos
Evita transmitir sesgos cognitivos, prejuicios, estereotipos, discriminar con expresiones u opiniones, el tono o la actitud, tus diseños, procesos o con la tecnología… Los sesgos inconscientes son nuestro peor enemigo.
¿Quieres desarrollar la habilidad de incluir? No te pierdas cómo en este post.
Si quieres saber más sobre estos conceptos, descarga la Guía #CEOPorLaDiversidad, elaborada por la Fundación Adecco
Además, podemos asesorarte. Contacta con una persona experta en DEIB o deja los datos de tu empresa en este formulario y nosotros te contactaremos.